Los Tigres de la UANL terminaron con nueve hombres en la cancha, pero con el quinto triunfo al hilo y el liderato general, al vencer 2-1 a los Gallos del Querétaro.

Nuestro equipo siempre tuvo la iniciativa, y luego de hacer el 2-1 desde los botines de Jordy Caicedo, antes había anotado Nicolás López, se nos vendría la noche encima con dos expulsiones.

Sin embargo el triunfo nos colocó en la cima del torneo, con 15 puntos en fila, por los cinco triunfos consecutivos.

EL ARRANQUE

De inició jugamos a lo que teníamos que jugar, ofensivos y siempre con la iniciativa de buscar el arco contrario, siendo Nico López el de la punta, entrando por el suspendido Luis Quiñones.

Sebastián Córdova fue otro que tuvo la movilidad por el centro y por la banda derecha, y con Carioca y Guido Pizarro atrás, las opciones comenzarían a llegar.

Primero fue André-Pierre Gignac con tiro de larga distancia, luego Javier Aquino con intento por derecha donde la zaga se imponía para romper el peligro, y así los dirigidos por Miguel Herrera era como estaban buscando-

GRAN JUGADA

Luego, a los 18 minutos, vendría esa gran jugada que iniciaba Nico López por el centro, se apoyaba a la izquierda con Raymundo Fulgencio, quien entraba entre dos y mandaba centro raso, potente, para que el Diente cerrara y anotara el gol que nos abría la esperanza de sumar de a tres.

Era un golazo por el tipo de jugada que habían fabricado desde los entrenamientos, pensando siempre en ofender con velocidad y certeza.

ROMPEN NUESTRA RACHA

Tigres había mantenido el cero en los últimos cuatro partidos, de hecho Nahuel Guzmán no había recibido gol, hasta que un penal sobre Barbona, a los 22 minutos, nos ponía en riesgo de perder la racha sin anotación en contra.

Ariel Nahuelpan no desaprovechó y empató el encuentro con tiro a la izquierda de Nahuel, quien nada pudo hacer para evitar la anotación, quedando la racha en 385 minutos sin gol.

SEGUNDO TIEMPO

La parte complementaria arrancaba y nuestro equipo comenzaría a dejar en claro que buscarían el segundo, con balones por los costados e intentando techar a la zaga contraria para llegar al área rival.

Empezarían los movimientos desde la banca, entrando Jordy Caicedo por Igor Lichnovsky, bajando a Pizarro a la central para tener más unidades en la ofensiva, algo que produciría la algarabía de los Incomparables.

DOBLE SENTIMIENTO

Caicedo aparecía en el área luego de una jugada entre Córdoba y Nico López, para empujar el balón al arco prácticamente vencido y hacer el 2-1 que si bien fue revisado en el VAR, no nos lo quitaron para sumar los tres puntos.

Pero la sensación de júbilo del ecuatoriano pasó a la impotencia y las lágrimas, al recibir la roja cinco minutos después, por una barrida considerada como juego brusco grave. Había recibido la amarilla, pero el VAR indicaba que era expulsión.

MÁS ROJAS

Con un hombre menos se pensaría que Tigres bajaría el ritmo al frente, pero a los 82’ Juan Pablo Vigón, quien tenía poco en la cancha, al haber entrado de cambio, recibía la roja luego de barrerse para tapar un balón.

La jugada ni siquiera fue revisada y los Incomparables veían cómo nos quedábamos con nueve en la cancha, por lo que había que redoblar esfuerzos para mantener el triunfo.

Ya en tiempo de reposición el Querétaro se quedaba con uno menos, lo que nos dio un par de minutos para aguantar atrás y darle a nuestra gente el triunfo.

Ahora nos prepararemos para visitar al Pachuca en la siguiente jornada, el domingo 7 de agosto a las 18:05 horas.